Después de la llegada de Braulio y Antonio Hidalgo, los movimientos dentro del club parecieron congelarse. Adrián Colunga fichaba definitivamente por el Recreativo de Huelva, y la salida de Sergio Asenjo de el Valladolid se paraliza, en parte porque son reacios a venderlo, en parte porque no conseguimos traspasar a César para ir a saco a por Asenjo. Pero como no conseguimos vender a César y no nos interesa en el equipo, lo apartamos de mala manera, a él y a Juanfran, en el primer entrenamiento en la ciudad deportiva con público, solo para decirles al día siguiente que se podrán entrenar en solitario con un preparador físico y un fisioterapeuta para ellos solos, hasta que consiguiesen fichar por otro equipo.
Aimar se fue al Benfica, en el que fue presentado el jueves, tras afeitarse la barba de bucanero con la que llegó a Zaragoza para iniciar la pretemporada. Se marcha por 6,5 millones, cifra ofrecida por el Benfica, porque por nos nuestros, para rato nos enteramos.
Del Benfica, cedido por un año, con opción de compra por 5 millones, nos traemos a cambio, porque para muchos de nosotros, está claro que la obtención de la cesión de este jugador ha sido la llave para la marcha de Aimar al benfica, a Fabio Coentrao, extremo zurdo de 20 años, internacional portugués en todas las categorías inferiores de su país. Y digo que nos traemos a cambio, porque tenia las maletas preparadas para irse cedido al Feyenoord. Llega Aimar, y le toca cambiar el destino en los billetes del avión.
Y Matuzalem abandonaba ayer la concentración para poner rumbo a la Lazio, cedido por una temporada, con opción de compra de entre 15 y 17 millones, y habiendo renovado con el Real Zaragoza por otra temporada más.
Espero que no nos tengamos que arrepentir de habernos deshecho de estos jugadores.
Demasiado pesimismo se desprende de alguna de tus palabras, supongo que al final vamos a ganar al Atlético de Madrid como "El pupas".
ResponderEliminarNo hay nada que lamentar, todo llega a su fin, los futbolistas pasan de equipo en equipo buscando el contrato de sus vidas; los equipos fichan a jugadores esperando hacer una gran temporada, año tras año. Los jugadores pasan, lo mismo que los entrenadores o los propietarios. Solo la afición permanece, y con ella el club.
Bienvenidos a los nuevos, y adiós y gracias a los que se van. Esto nunca cambiará, y salgan las cosas mejor o peor, los que amamos de verdad al club permaneceremos, aunque sea en Segunda, o aunque pase algo peor.