Fue un precioso bebé de 3 puntos dedicados a nuestro capi Charly por la lesión sufrida recientemente.
Tras un parto bastante complicado, con este recién nacido se da carpetazo a la agonía sufrida después de 9 meses sin ganar fuera de casa y a la crisis tan exaltada por los medios.
Y aunque una vez más la gran mayoría del tiempo pareciésemos unos patos sin cabeza, esta vez teníamos una escusa decente.
Con una defensa de circunstancia debido a la sanción de Ayala y Pavon, la lesión de Juanfran y a los pocos segundos de empezar el partido la lesión de Sergio Fernández (rotura de fibras) hizo que el equipo se tuviese que reorganizar y esforzar en ayudar a la defensa.
Primer partido completo de Paredes que acabó físicamente reventado por las imágenes vistas. Espectacular Goni que demostró que no se necesita buscar muy lejos para encontrar el cuarto central. Y el siempre cumplidor Chus que aún sin ser titular, se papeó el solito todo el partido supliendo en el primer minuto a Sergio.
Un partido muy roto en la primera parte en la que se corría de portería a portería y que debido a nuestros problemas defensivos nos metieron más de un susto, que gracias a la poca puntería del rival y a César estos no fueron a más.
La segunda parte resultó más estable y Óscar empezó a inspirarse de cara a la portería rival. Una internada suya dentro del área provocó que el portero rival lo derribase irregularmente y que el trencilla marcase el punto de pena máxima. Diego Milito transformó el penalty colocándolo arriba y por el centro. Poco después Diego tendría en sus botas otra oportunidad para ampliar el marcador, pero su vaselina se estrelló en el larguero.
Sin nada más digno de destacar salvo los sustos de lesión de Luccin y César y las 4 tarjetas amarillas (Sergio García, Oliveira, César y Luccin) con las que nos volvemos de Almería, 3 de ellas a causa de las protestas por una cesión en nuestra contra.
Tines razón en tu crónica. El Zaragoza jugó a lo equipo grande. No hizo un gran partido, pudo perder, pero ganó. Y yo pienso que de aquí, vamos hacia adelante. Con Ósccar. Sin Aimar.
ResponderEliminarSaludos.