lunes, 19 de mayo de 2008

¡A por ellos! 2.0, o Real Zaragoza 2.0






Pues se consumó lo que todos temíamos y nadie queríamos. Poco hay que hablar del partido de ayer, si acaso comentar que, como esperaba, con el pitido inicial de Iturralde se vio ya con qué ánimos afrontaba el partido el Real Zaragoza, lo que no auguraba nada bueno. Los dos primeros goles mallorquinistas continuaron la tónica del pobre nivel de la defensa zaragocista de esta temporada, siendo ambos sendos regalos de los hombres de retaguardia. De todas maneras, el Real Zaragoza no descendió ayer, lleva haciéndolo desde el partido de Salónica, por lo menos.

No quiero abandonar el Ono Estadi sin hacer mención de varios gestos deportivos que le hacen a uno congraciarse con el fútbol. Cuando en Santander ya iba el Rácing ganando a Osasuna, y con el marcador 2-1, un gol zaragocista en ese momento les salvaba, y la grada del Ono Estadi empezó a gritar "Zaragoza, Zaragoza", para dar ánimos a los blanquillos. Al final del partido, con el desastre consumado, y habiendo perdido ellos la opción de jugar la UEFA pese a haber hecho su trabajo, se acercaron los jugadores bermellones a los zaragocistas para darles ánimos. Fernando Navarro, en declaraciones al final del partido a Canal+, decía sentirlo casi más por el Real Zaragoza que por el Mallorca, y nos daba todos los ánimos del mundo para el año que viene. Ni mencionó la UEFA hasta que el periodista no le preguntó expresamente por ella. Y lo mismo su presidente, al dejar el palco, en sus primeras palabras tras el encuentro. Bandrés salió pitando de esa zona, visiblemente afectado, y diciendo "no puedo" a los requerimientos de la periodista de la televisión. Sé que no tenían por qué hacerlo, sé que en otros lugares se habrá celebrado nuestro descenso. Pero en esos momentos mi gratitud no tenía límites.

Acabada la temporada, y habiendo sido echados de la Primera División por nuestros propios deméritos, aparece la inevitable pregunta. ¿Y ahora qué? De entrada, uno tiene la impresión de que este equipo se va a desmantelar, el Real Zaragoza de la próxima campaña en Segunda División poco tendrá que ver como bloque con éste, pese a que creo que algunos jugadores se quedarán: casi toda la defensa (lo que no augura nada bueno, a menos que este nuevo año se pongan a trabajar de verdad), algunos centrocampistas (Zapater, por encima de todos) y ningún o casi ningún delantero. Creo que se debería seguir con Villanova, en el poco tiempo que ha tenido ha demostrado que es capaz de hacer que el equipo juegue a algo (o lo parezca), y ha logrado hacer bloque, algo que ha faltado en toda la campaña. Dicho esto, ¿qué ha fallado este año, para acabar en el infierno?

A buen seguro no puede dejarse ningún estamento del club sin apuntar como responsable, en parte, de este descenso. Bandrés, cuando recuperó el habla ante los medios de comunicación, reiteró más de una vez que responsables eran todos (incluso creo que incluyó en el saco a los periodistas, y solo dejó fuera a la afición), y reconoció que ya había puesto su cargo a disposición del máximo accionista, Agapito Iglesias, quien no había aceptado su dimisión. Pese a que ellos dos tengan su parte de culpa, junto a la parte que le toca a Pardeza y Herrera por confeccionar un equipo repleto de autocomplacencia y tiznado con unas gotas de talento, y a la parte de los cuatro entrenadores, cada uno con su mayor o menor carga de responsabilidad, sin duda los principales responsables del descenso han sido los jugadores.

Un equipo confeccionado a golpe de talonario (el mejor ejemplo es el estrambótico fichaje de Ayala, recién fichado por el Villarreal, quien por cierto, ¿qué pensará ahora de la decisión que tomó?), con un techo salarial altísimo y muchísimas fichas por encima de lo que nunca había hecho este club, del que se hablaba que estaba ingeniado para acceder a la Champions, simplemente no jugó. No sé si se pensaban que "por ser vos quien sois" les iban a regalar los partidos; si cada jugador pensaba que los diez compañeros que tenía al lado ganarían los partidos de calle por lo buenos que eran, y no hacía falta ponerse a correr y a trabajar; o si realmente nunca creyeron que un equipo como el que ellos conformaban pudieran verse abocados a algo así en esta temporada. Y al no saber (o no querer) verle las orejas al lobo, al final se nos ha comido con patatas, ante la complacencia de una plantilla que solo con la llegada del cuarto entrenador se concienció de lo que podía acabar pasando.

El futuro que nos espera es, con suerte, un año en Segunda División, y la sensación de no haber aprendido la lección de hace seis años, en los que, tras el regreso a la Primera División todos proclamábamos a los cuatro vientos "¡Nunca más!". Pues no ha podido ser, hemos vuelto a tropezar en la misma piedra, y dentro de nada volverán esos discursos de "Nuestro único objetivo es el ascenso", "Este año la Copa no importa, hemos de centrarnos en la Liga", o "Tenemos la difícil obligación de ascender a la primera", inequívocos signos de que estamos en Segunda, tópicos a los que se recurre en esos momentos en los que te quedas sin palabras.

Sin embargo, yo no comparto las opiniones que apuntan a que el equipo, con la deuda que arrastra, está abocado a la desaparición al caer a la Segunda División. Sé que me va a tocar decirlo mil veces, y sé que no tengo nada para apoyar mi postura (ni presupuestos, ni informes de deuda, ni cifras de publicidad y derechos de imagen por la retransmisión televisiva), pero es que no me lo creo, peores casos se han visto (sin ir más lejos, el mismo Levante, todo el año en Primera sin pagar a la plantilla, ahora ya sabemos cuál fue el auténtico motivo de la marcha de Savio), y el Zaragoza saldrá de ésta. Tarde o temprano, más o menos maltrecho, pero saldrá adelante.

Ahora mismo la decepción y la tristeza pueden hacer pensar en que no se logrará un objetivo tan complicado como volver a la máxima categoría a la primera intentona (solo hay que ver lo que le cuesta a la Real Sociedad, que tiene opciones pero no tiene nada asegurado), pero ya se logró la última vez, y yo creo que es posible. Es más, lo mismo que me pasa con el CAI, para verle ya en ACB, no puedo esperar a que empiece la próxima temporada para que el Real Zaragoza inicie su gran remontada. Se me va a hacer largo el verano, pese a la Eurocopa y los Juegos Olímpicos. Porque me muero de ganas de que empiecen ya las próximas temporadas de fútbol y baloncesto. De modo que, ahora más que nunca, ¡a por ellos!

P.D.: Al final, el gol de Ayala no podrá ser el Nayim 2.0, pero ¡cómo vivimos aquella noche! Que nos quiten lo bailao.

5 comentarios:

  1. RANDY
    No soy tan optimista como tu , la segunda division hoy en dia , no es la de hace seis años , es mucho mas competitiva , no obstante espero que si seamos uno de los candidatos a el ascenso.
    Respecto a Bandres y compañia , no me vale con poner el cargo a disposicion de Agapito , lo que tienen que hacer es presentar una dimision irrevocable ¿o acaso pretenden seguir chupando del bote?
    Saludos

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  2. Yo por mi parte estoy deseando que empiece ya la BBVA, igual soy masoca, pero tengo ganas de volver a sentir el REAL ZARAGOZA, últimamente más que sentir "lo sufria", yo estoy convencido que no vamos a subir el primer año, después no se que pasará, confio en que no desaparezcamos, pero lo de este año no se lo deseo a nadie.

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  3. Zaragoza

    Yo tambien lo veo negro, muy negro, ahora hay que empezar de nuevo, desde el principio, hay que renovar todos los estamentos del club, administrativo y deportivo y cambiar completamente toda la plantilla, excepto dos o tres, el resto no sirve, si les ha faltado garra en primera, imaginad en segunda, donde hay que salir a morder.

    Y si es dificil con una economia saneada, con 113 millones de deuda, es la rehostia, las cosas estan muy negras, ojala todo sea mas facil, pero lo vamos a pasar mal, el ladrillo esta en horas bajas y el patrimonio inmobiliario del club, se deprecia a marchas forzadas.

    Un saludo.

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  4. Pardeza trajo a D'Alessandro, V.F. a Aimar. Ninguno cabia de media punta, por mucho que se empeñaran en el rombo. Se los tuvo que recolocar de interiores. Pero ni marcaban la diferencia y arriba, y encima tampoco defendían. El equipo estos dos años ha funcionado sólo en casa, cuando el resto de equipos te dan la pelota. Fuera, este año, un partido solo ganado. Pero el año pasado no fue mucho mejor, sólo se ganó en Monjuic en la segunda vuelta.
    El año pasado aún se aguantó en defensa con Milito y Piqué.
    Pero este, sin interiores, es decir, sin medio campo, con defensa muy frágil, el equipo se ha ido descosiendo.
    No hemos DISPUTADO los partidos de fuera.
    A segunda con todo merecimiento. Tristemente.
    Crisis deportiva, económica y de identidad. Muy grave.

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  5. Toca empezar a hacer bien las cosas para que la segunda división sea corta, muy corta.

    Un saludo

    www.dedomingoadomingo.com

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